Por Iliana de Silva, CEO y cofundadora de Techreo Las finanzas, sin distinción de generación, se entrelazan con cada aspecto de nuestras vidas, mar
Por Iliana de Silva, CEO y cofundadora de Techreo
Las finanzas, sin distinción de generación, se entrelazan con cada aspecto de nuestras vidas, marcando hitos y presentando desafíos en cada etapa. Desde los primeros pasos de independencia financiera hasta los años dorados de la jubilación, cada grupo etario requiere una atención específica.
Los servicios y productos financieros que adquirimos a lo largo de nuestra vida van evolucionando constantemente, así como los tipos de créditos. En Bolivia, según la ASFI (Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero), el 31% de los créditos solicitados corresponden a microcréditos, y el 26% de los otorgados corresponden a créditos de vivienda social. Sin embargo, los depósitos realizados en Bolivia en esta última fecha son, en su mayoría con un 49%, depósitos a plazo fijo, y con un 30,4% depósitos a cuentas de ahorro.
Por ello, resulta interesante aprovechar la ocasión para analizar cómo los servicios que ofrecemos en el ecosistema financiero deben ir en consonancia con cada una de las etapas de la vida del consumidor, permitiéndonos evolucionar nuestra perspectiva de proveedores a aliados de primera opción.
Comencemos con los primeros ingresos, aquellos que marcan el inicio de la independencia financiera. En esta etapa, donde actualmente transita la mayoría de la Generación Z (nacidos a finales de la década de los 90 e inicios de los 2000), es crucial dotar a los jóvenes con las herramientas adecuadas para entender y gestionar su dinero. La educación financiera y la accesibilidad a servicios bancarios simples son fundamentales en esta etapa. Sin embargo, la perspectiva debe ir más allá y comprender que este grupo poblacional son nativos digitales y no interactúan con estas herramientas más allá de su teléfono móvil.
La transformación digital ya no es un lujo, sino una necesidad. Con los “GenZers” encaminado a liderar la economía, las instituciones financieras que no se adapten digitalmente corren el riesgo de quedar obsoletas. La disponibilidad de servicios financieros debe ser inmediata y digital para satisfacer las demandas de esta generación emergente.
Avancemos a la próxima etapa, la formación de un hogar. Los Millennials y Gen X viven un momento donde las finanzas adquieren una nueva dimensión. La planificación familiar, la compra de vivienda y las inversiones a largo plazo se convierten en prioridades. Soluciones flexibles y accesibles pueden allanar el camino para construir un futuro sólido. En este punto, el servicio de asesoría personalizada también comienza a cobrar especial relevancia, pues la educación financiera no es suficiente para respaldar la selección de opciones crediticias y otros servicios propios de este momento de la vida.
En las etapas de emprendimiento y desarrollo profesional, la gestión financiera se vuelve más compleja. Servicios financieros adaptados a las necesidades del emprendedor o del profesional en ascenso pueden ser la diferencia entre el éxito y los desafíos. Es clave que la nueva industria financiera donde conviven bancos, fintechs y otros proveedores de servicios conecten con privados y gubernamentales para crear opciones que eleven la capacidad de supervivencia de los emprendedores a corto plazo.
Finalmente, la jubilación es un capítulo especial que requiere una planificación meticulosa, aunque no es una generación digital, sigue teniendo necesidades financieras que requieren ser atendidas. La seguridad financiera en los años dorados es esencial y podemos hacerla más fácil con procesos semidigitales. Planes de inversión seguros y estrategias de retiro bien diseñadas pueden brindar la tranquilidad necesaria para disfrutar de esta etapa plenamente.
En este viaje llamado vida, las finanzas están intrínsecamente vinculadas a cada experiencia. Al adoptar un enfoque consciente y adaptado a cada momento, podemos transformar las finanzas de una preocupación constante a una herramienta que impulsa nuestras metas y nos brinda la tranquilidad necesaria en cada paso del camino, haciéndolo fácil. Porque en última instancia, las finanzas no son solo números; son la clave para vivir cada etapa plenamente y sin limitaciones.
COMMENTS