El presidente de Bolivia, Luis Arce, destacó recientemente en sus redes sociales que la demanda interna se está dinamizando y se convierte nuevamente
El presidente de Bolivia, Luis Arce, destacó recientemente en sus redes sociales que la demanda interna se está dinamizando y se convierte nuevamente en un importante motor para la economía del país. Esta afirmación se basa en el alentador crecimiento del 15% en las ventas facturadas de restaurantes durante el primer semestre de 2023.
«Iniciamos el mes patrio llenos de esperanza y seguros de que vamos por el camino correcto. Las ventas facturadas de restaurantes subieron 15% en el primer semestre de 2023. La demanda interna se dinamiza y vuelve a ser un importante motor de la economía», publicó el mandatario en sus redes sociales.
De acuerdo con el informe proporcionado por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, las ventas facturadas de los restaurantes en Bolivia alcanzaron la cifra de $us 312 millones al cierre del primer semestre del presente año. Este dato representa un incremento significativo del 15% en comparación con el mismo período de 2022.
El crecimiento se ha distribuido de manera favorable en diferentes regiones del país. Santa Cruz lidera con un sólido crecimiento del 16%, seguido de Cochabamba con un 15% y La Paz con un 12%. Además, los demás departamentos también registraron tasas de variación positiva y, en conjunto, experimentaron un crecimiento del 25%.
Además de las ventas facturadas de restaurantes, otros sectores también han registrado un comportamiento positivo en la economía boliviana. Las ventas facturadas de los hoteles han experimentado un aumento del 15% a nivel nacional, alcanzando un total de $us 52 millones hasta el mes de junio de 2023, en comparación con los $us 45 millones recaudados en el primer semestre del año anterior.
Por otra parte, el transporte aéreo también ha mostrado señales de recuperación, con un incremento del 7% en su valor de facturación al primer semestre de 2023. Este sector alcanzó la cifra de $us 210 millones, superando los $us 195 millones facturados en un período similar del año pasado.
El crecimiento sostenido en estos sectores clave de la economía boliviana refleja el compromiso del gobierno con el fortalecimiento de la demanda interna y el fomento de la actividad económica. Estos resultados positivos indican un panorama alentador para el país y sugieren que las políticas implementadas están generando resultados tangibles y prometedores.
El presidente Arce expresó su satisfacción con los avances y se mostró optimista sobre el futuro económico de Bolivia. Estos logros en el primer semestre de 2023 abren la puerta para seguir trabajando en el desarrollo y la estabilidad económica del país, buscando alcanzar mayores niveles de bienestar y prosperidad para todos los bolivianos.
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