El nuevo tramo de la carretera que atraviesa la zona de El Sillar, entre Cochabamba y Santa Cruz, lleva casi un 60% de avance, pese a la obligatoria i
El nuevo tramo de la carretera que atraviesa la zona de El Sillar, entre Cochabamba y Santa Cruz, lleva casi un 60% de avance, pese a la obligatoria interrupción de dos meses de las obras debido a los efectos de la pandemia del Covid-19, señala un comunicado difundido por la empresa china Sinohydro que tiene a su cargo la ejecución del proyecto.
El documento destaca que Sinohydro fue la primera empresa china en reanudar obras en Bolivia, “gracias a que se adoptaron medidas de control y bioseguridad estrictas para proteger la salud de los trabajadores bolivianos y chinos”.
La carretera El Sillar, ubicada en el Chapare, forma parte de la Ruta Nacional N4, que conecta los departamentos de Santa Cruz y Cochabamba, y del corredor internacional que atraviesa de este a oeste Sudamérica.
El proyecto, uno de los de mayor relevancia de cuantos se ejecutan en el país, tiene una longitud de aproximadamente 30 kilómetros y apunta a resolver definitivamente los problemas emergentes de la inestabilidad geológica en la zona, que fueron la causa de constantes derrumbes e interrupciones del tránsito a lo largo de la historia.
“El objetivo del proyecto es ampliación a 20.6 metros y el perfeccionamiento de la carretera pavimentada existente, con dos carriles en cada dirección. Los trabajos incluyen movimientos de tierra, asfaltado, dos túneles separados de 1.7 kilómetros, 29 puentes, 5,6 km de muro de contención de hormigón armado, obras de drenaje y de protección y marcas viales, además de 120 alcantarillas”, explica el comunicado de Sinohydro.
De acuerdo a los términos del contrato, la obra debe realizarse dentro de un período de 2098 días, de los cuales 360 corresponden al diseño, 1018 a la construcción, 180 ma la reparación de eventuales defectos y 540 días de período de garantía.
“Hemos retomado un ritmo intenso de trabajo y esperamos concluir el 40% restante de la obra dentro de un plazo racional de tiempo, considerando las interrupciones forzosas que se produjeron por la pandemia y otros eventos, para que Bolivia cuente con un tramo carretero en las mejores condiciones de seguridad y transitabilidad”, concluye la empresa.
Sinohydro
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