Se estima que la construcción de las dos plantas de producción de carbonato de litio con tecnología (EDL), en Oruro y Potosí, concluya el segundo seme
Se estima que la construcción de las dos plantas de producción de carbonato de litio con tecnología (EDL), en Oruro y Potosí, concluya el segundo semestre del año 2024, informó este domingo el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina.
En contacto con Bolivia Tv, la autoridad indicó que el convenio que en enero firmaron Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) y el consorcio chino CATL BRUNP & CMOC (CBC) establece primero la realización de estudios de ingeniería, “conceptual y a diseño final”, para emplazar esas plantas.
Se prevé tener concluidos esos estudios aproximadamente a mediados del mes de julio del presente año, para proceder “de manera inmediata” a la construcción de tales factorías industriales.
“En términos de operación, se estima que las plantas (de EDL) puedan estar finalizando su construcción en el segundo semestre de 2024 y a partir de allí comenzar lógicamente su arranque, su operación”, afirmó el ministro.
Las dos plantas de EDL serán construidas en los salares de Uyuni y Coipasa, el primero ubicado en el departamento de Potosí y el segundo en Oruro. Cada una tendrá una capacidad de producción de hasta 25.000 toneladas año de carbonato de litio grado batería.
Según la estatal YLB, la aplicación de la tecnología EDL acelerará la industrialización de los recursos evaporíticos en los salares, lo que permitirá al país posicionarse en el mercado internacional.
“Esta es una tecnología que ya se está implementando en el resto de países, a diferencia de la tecnología tradicional basada en piscinas, esta tecnología de Extracción (Directa de Litio) permite disminuir los tiempos”, resaltó Molina.
Planta industrial
Bolivia contará con la primera Planta Industrial de Carbonato de Litio con tecnología clásica de 15.000 toneladas de producción. A la fecha la construcción de esta factoría tiene un avance de 93%, lo que significa que “prácticamente se encuentra en la recta final”, informó el titular de Hidrocarburos y Energías.
Detalló que entre fines de 2022 e inicios de este año, se hizo los trabajos de “precomisionamiento y comisionamiento” a la construcción de esa planta, lo cual implica todas las actividades previas para su arranque.
“Es decir (que se hizo) un check list. Cuando usted ingresa a una casa (revisa) si sirve un interruptor, las conexiones, el flujo de energía, los distintos equipos, todo eso se ha ido desarrollando y estamos en la etapa final de esas etapas. Por lo tanto, la siguiente etapa significa el arranque de la planta”, explicó.
De acuerdo con los datos de la autoridad, en 2022, la tonelada de carbonato de litio bordeó los $us 80.000 y ayer, sábado, llegó a $us 42.000; es decir que se trata de un recurso que tiene precios que varían en el mercado internacional.
“La diferencia, la oscilación, de precios es muy cambiante, pero existe una demanda insatisfecha. Se cree que esa demanda insatisfecha vaya crecer en los próximos años entre un 300 a 400 por ciento inclusive, lo que nos hace atractivos en términos de producción”, señaló.
El carbonato de litio es una materia prima para la fabricación de baterías y ante la creciente producción de vehículos eléctricos, la demanda de éste y otros derivados del metal blanco se disparó en el mercado internacional.
“¿Por qué es tan importante el litio?, primero porque es un recurso estratégico que no todos los países tienen y que Bolivia, una vez más gracias a la bendición de Dios y la naturaleza, tiene este recurso en abundancia”, destacó la autoridad gubernamental.
Bolivia encara la industrialización del litio con la puesta en marcha de plantas de cloruro de potasio, carbonato de litio, cátodos y baterías, a escala piloto e industrial, cuya producción es comercializada en los mercados nacional e internacional.
Actualmente, el país tiene 21 millones de toneladas de litio en Uyuni, Potosí. Con ese volumen, se mantiene como el territorio con mayores reservas del metal, que se incrementarán con la exploración y cuantificación en los salares de Pastos Grandes y Coipasa.
MC/
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